Nuestra primera parada de la excursión del día fue en Belvés.
Belvés es un pequeño pueblo que está dentro de la asociación de los pueblos más bellos de Francia. Un pequeño paseo nos sirvió para admirar la Plaza del Mercado con pilares de madera y su lado norte donde se halla el “pilori” lugar utilizado para ahorcar a los bandidos, una pequeña iglesia del siglo XV, el convento de los frailes Predicadores, la Torre de los Cónsules y un pequeño entramado de calles con encanto.
Continuamos hacia Monpazier, nuestra próxima visita.
Monpazier está considerada como el ejemplo más típico de bastidas del suroeste y una de las mejores conservadas del Perigord.
La ciudad forma un cuadrilatero de 400 por 200 metros y en centro, la plaza de las Comieres rodeada de casas con soportales en la planta baja.
En el centro un antiguo mercado que se sujeta con pilares de madera.
De las seis puertas que tenia la bastida de Monpazier solo se conservan tres y en ellas todavía se pueden ver las ranuras de las rejas y las bisagras que sostenian las puertas de madera.
Fuera, la iglesia de Saint Dominique, de estilo románico y donde nos sorprendió una curiosa formar de pedir donativos para su restauración. Un tronco grueso con muchas chinchetas doradas y un martillo para clavarlas. Con un donativo podías clavar una chincheta dorada. Muy curioso.
Volviendo a la carretera llegamos a la ciudad de Bergerac.
El Dordoña que nos ha acompañado en muchas de nuestras excursiones, cruza Bergerac
Un río que hizo prospera la economía de la ciudad y que hoy junto a su puerto es partida de muchos paseos turísticos.
En Bergerac es imperdible visitar la Catedral de Nôtre-Dame de estilo neo-gótico con un esbelto campanario de 80 metros de altura contruida en el siglo XIX.
Otro lugar emblemático de la ciudad es la Iglesia de Saint Jacques. De estilo románico es parada obligada para los peregrinos del Camino de Santiago y detrás de la iglesia la Plaza Pelissiere con una estatua de Cyrano nos recuerda al famoso personaje.
El Museo del Tabaco y el claustro de los “Recollets” junto con un paseo por sus callejuelas pintorescas para llegar al puerto junto al Dordoña completaron nuestra visita a la ciudad.
Se acabó nuestra excursión…Mañana más.
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